Algunas veces, no hay síntomas del diabetes. Cuando los síntomas aparecen, suelen incluir sed o micción excesiva, fatiga, pérdida de peso o visión borrosa.
Según lo expone la CDC en su articulo sobre los síntomas del diabetes que se deben tomar como alerta, menciona los siguientes:
- Necesidad de orinar (hacer pis) con mucha frecuencia, y también durante la noche
- Mucha sed
- Pérdida de peso sin intentarlo
- Mucha hambre
- La visión borrosa
- Hormigueo o entumecimiento en las manos o los pies
- Mucho cansancio
- La piel muy seca
- Llagas que cicatrizan muy lentamente
- Más infecciones de lo habitual
Los síntomas de la diabetes tipo 1 pueden aparecer rápidamente, en cuestión de semanas. En cambio, los síntomas de la diabetes tipo 2 suelen progresar muy despacio, a lo largo de varios años, y pueden ser tan leves que a veces ni siquiera se notan. Muchas personas con diabetes tipo 2 no tienen síntomas. Algunas solo se enteran de que tienen la enfermedad cuando surgen problemas de salud relacionados con la diabetes, como visión borrosa o problemas del corazón.
Ahondando más sobre los síntomas del diabetes
Además de la sed excesiva y la micción frecuente, los siguientes son otros indicadores de diabetes o prediabetes:
Candidiasis crónica
Los altos niveles de azúcar en la sangre originados por la diabetes debilitan el sistema inmunitario, lo que dificulta la lucha del organismo contra las infecciones.
Las infecciones vaginales crónicas causadas por hongos son especialmente comunes en mujeres diabéticas que no tratan la enfermedad, porque el azúcar extra en la sangre favorece el crecimiento de hongos.
Otros tipos de infecciones recurrentes —como infecciones cutáneas, de la vejiga o de las vías urinarias también pueden indicar la presencia de diabetes.
Visión borrosa
Si parece que debes actualizar la corrección de tus anteojos con frecuencia, deberías hacerte un análisis de detección de diabetes. El cambio rápido de los niveles de azúcar en la sangre puede hacer que las lentes de tus ojos se nublen o hinchen, lo que causa visión borrosa.
Si no se trata, la diabetes puede dañar los vasos sanguíneos en la parte posterior del ojo y causar cataratas, glaucoma y ceguera.
Disfunción sexual
La disfunción eréctil —cuando un hombre no puede tener o mantener una erección— es común en los hombres diabéticos.
Estudios indican que tanto los hombres como las mujeres que no controlan bien su diabetes reportan disminución del deseo sexual. Según indica la American Diabetes Association, los investigadores creen que la inflamación que causa la diabetes puede afectar la parte del cerebro que controla el deseo sexual. Los niveles bajos de testosterona también podrían influir.
Náuseas o estreñimiento
Un alto nivel de azúcar en la sangre puede enlentecer el proceso digestivo y causar náuseas, estreñimiento o malestar estomacal.
Una enfermedad gastrointestinal típica normalmente no dura más de dos o tres días. Si tienes náuseas, estreñimiento o vómitos que duran más de eso, lo más probable es que la causa del problema sea otra, la detección de la diabetes debería ser parte de las recomendaciones del médico.
Una lesión que tarda en sanar
Si tienes un corte o una raspadura que parece demorar siglos en sanar, podría ser por culpa de la diabetes. Se sabe que el azúcar extra en la sangre de una persona diabética demora la curación de las heridas, lo que crea vulnerabilidad a las infecciones.
Cambios en el estado de ánimo
Si hallas que estás más irritable o tu familia se queja de tus cambios de humor, podría tratarse de otro indicador de diabetes. La diabetes también causa fatiga, lo cual puede aumentar el mal humor.
La glucosa elevada afecta el cerebro. Una persona diabética sin diagnosticar no puede controlar sus emociones. Lo interesante es que, una vez bajo tratamiento y con la glucosa controlada, esos síntomas mejoran.
Pérdida de peso inexplicada
Generalmente, perder peso es algo bueno. Pero si has bajado considerablemente de peso sin hacer ningún cambio en la dieta o en la rutina de ejercicio, podría deberse a la diabetes.
Cuando tienes diabetes, el azúcar que el organismo necesita como fuente de energía se elimina con la orina, por lo que el cuerpo comienza a quemar grasas y músculos para obtener energía. Eso puede causar una pérdida de peso rápida y drástica.
Manchas oscuras en la piel
La diabetes puede hacer que los pliegues de la piel alrededor del cuello, en las axilas o en las ingles se oscurezcan y tomen un aspecto curtido. Parecería que el cuello está sucio, pero la suciedad no se quita con el agua.
Esas manchas oscuras en la piel, llamadas acantosis pigmentaria, son un síntoma de resistencia a la insulina, y pueden ser una señal temprana de diabetes.
Acné o vello facial excesivo
A algunas mujeres con resistencia a la insulina les crece un vello grueso y duro en el rostro porque la insulina puede estimular a las células para que produzcan las hormonas masculinas que hacen crecer el vello. Esas mismas hormonas también pueden causar acné.
Papilomas cutáneos
Otra señal temprana de la diabetes es la aparición de papilomas cutáneos, crecimientos carnosos que con frecuencia aparecen en el cuello, los párpados, las axilas y las ingles.
Si bien estos papilomas por lo general son benignos, muchos estudios hallaron un mayor riesgo de diabetes en quienes los tienen.
Los investigadores no comprenden claramente el mecanismo por el cual la diabetes causa papilomas cutáneos, pero creen que los altos niveles de insulina serían los responsables. “La resistencia a la insulina activa factores de crecimiento que hacen que las cosas crezcan y se modifiquen”.
Si quieres conocer un poco más sobre este padecimiento, visita nuestro artículo sobre Causas de la Diabetes.